La educación popular es ante todo un proceso social y organizativo que parte de la necesidad por valorar el saber propio de las comunidades en correlación con el conocimiento científico y desde allí plantear reflexiones que les permitan a los y las estudiantes comprender el mundo y su capacidad para incidir en él. Durante el IV encuentro de educación popular en Bogotá se subrayó insistentemente que la educación popular debe necesariamente plantearse desde el anticapitalismo, los feminismos, el antiimperialismo, el antirracismo y propender por una unidad del movimiento social que busque transformaciones profundas, que problematice los valores con los que hoy la sociedad juzga los fenómenos sociales y sobre todo que se sienta en la capacidad colectiva para crear nuevos paradigmas en clave de equidad y justicia socio ambiental.