Iraima MogollonImagen: Roque Cediel Romero
¿Recordamos cuando afirmábamos que la televisión es un desarrollo tecnológico que ofrece posibilidades enormes para la educación y la información? ¿Recordamos también cuando afirmábamos que esas posibilidades eran desperdiciadas y se convertía la televisión en un medio de entretenimiento y comunicación de contenidos, muchas veces violentos y contrarios a valores humanos virtuosos? ¿Nos estaremos preguntando algo semejante cuando pensamos en Internet?
El profesor Roque Cediel Romero Páez conoce muy bien el impacto que han tenido las nuevas Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) y le preocupa que niños, jóvenes, docentes, padres e, incluso, instituciones no visualicen el poder que brinda Internet para la enseñanza y el aprendizaje, y que se vea esta herramienta casi exclusivamente como un espacio de entretenimiento y diversión. Su gran reto se orienta a la formación de una sociedad que no solo sepa usar las TIC, sino que las aproveche en el campo educativo.
Por ello, con esa vocación pedagógica que se inició desde que cursaba el octavo grado de educación básica y que mantiene hasta sus estudios de posgrado, se siente en la necesidad de problematizar las formas tradicionales de la enseñanza y propone replantear los espacios educativos, aprovechando la evolución de las Tecnologías de Aprendizaje y Conocimiento (TAC). Hacia ello se ha orientado su labor investigativa, justo en el terreno abonado por las nuevas tecnologías, como nos lo explica en su artículo “Factores que contribuyen o dificultan la implementación de un ambiente de aprendizaje mediado por dispositivos móviles” (2016).
Más de quince años ha dedicado el profesor Cediel a la creación, mantenimiento y actualización del proyecto Mi Colegio en la Nube, por lo que lo considera un hijo más. Ese proyecto consiste en la implementación de un sistema informático virtual, alterno al aula tradicional. Podemos visualizarlo en http://www.micolegioenlanube.com/ y fácilmente nos daremos cuenta de sus bondades para todos los actores de las dinámicas de enseñanza y aprendizaje.
El portal Mi Colegio en la Nube ha sido visitado por casi cinco millones de usuarios de los cinco continentes solo en los últimos cuatro años. Sin embargo, benefició inicialmente a la comunidad del colegio Rodolfo Llinás, luego se expandió por Bogotá y posteriormente se conoció en Latinoamérica y el mundo. Se sustenta en la posibilidad real de aprendizaje móvil y ubicuo, es decir, aprendizaje que “debe desarrollarse bajo una infraestructura tecnológica que permita a los educandos adquirir conocimientos en cualquier momento y lugar”, así lo afirma el profesor Cediel en entrevista para la Fundación Eduna.
Motivado por sus estudiantes y colegas, se propuso como meta el diseño del portal con el fin de brindar recursos digitales abiertos y gratuitos. Comenzó a recolectar información y recursos educativos de diversos sitios web, pero luego vio que los propios docentes “estaban en capacidad de crear sus propios videos, guías, evaluaciones y presentaciones; que estuvieran de acuerdo a su contexto y necesidades educativas.” (Roque Cediel Romero, “Mi Colegio en la Nube. Aprovechamiento del aprendizaje móvil y ubicuo para el desarrollo humano en los niños y jóvenes”, 2015).
Es muy interesante el punto de partida pedagógico del proyecto Mi Colegio en la Nube, puesto que promueve el aprendizaje a través de la experiencia, de acuerdo a un marco cognitivo ya existente. ¿Y qué mejor recurso que Internet para promover el autoaprendizaje al ritmo, intereses y motivaciones del estudiante? El conocimiento abierto en la nube permite aquello que tanto aspiramos los docentes para la formación de ciudadanos libres: que las personas sean autónomas, desarrollen sus potencialidades de inteligencias múltiples y se enfoquen en sus talentos y preferencias.
Los estudiantes pueden consultar los temas de toda la educación básica que les interesen, puesto que Mi Colegio en la Nube dispone de un currículo básico estándar desde los grados preescolar a once. Además, ofrece vínculos a otras plataformas que le estimulan en áreas de conocimiento alternas. No hay excusas para incumplir y no obtener buen nivel académico. De hecho, el “colegio Rodolfo Llinás ha obtenido las mejores calificaciones en las pruebas de estado en los niveles 3, 5, 9 y 11 en los últimos 4 años.”, afirma con mucha satisfacción el maestro en entrevista para la Fundación Eduna (2019).
El profesor Cediel dice que los niños prácticamente nacen con un celular debajo del brazo, aprenden solos a utilizarlos y enseñan al respecto a sus familiares mayores. La pregunta es si los padres están en la capacidad, por un lado, de conocer cómo sus hijos utilizan los dispositivos electrónicos y, por otro, de aprovechar ellos mismos la oportunidad de aprendizaje que ofrecen las TAC. La respuesta es asumir el reto de interesarlos en el uso de plataformas como Edmodo. Con estas pueden estar informados del progreso de sus hijos, lo cual redunda positivamente en el nivel académico y en la comunicación entre padres y profesores.
El proyecto Mi Colegio en la Nube ha brindado a su creador la principal satisfacción de poder ofrecer asesoría y recursos digitales abiertos a miles de estudiantes y docentes en todo el mundo. Lo ha expuesto ante públicos de otros países: Panamá, Chile, México, Argentina, Colombia y Francia. También ha recibido reconocimientos de entes de gran relevancia, como la Unesco, Microsoft, Ministerio de Educación Nacional de Colombia, Congreso Virtual Educa OEA.
A esas satisfacciones, premios y reconocimientos el profesor Cediel suma lo que considera la más importante función de su proyecto de contribución a la educación a través de las TIC: la disminución de la brecha digital, social, de género, ubicación geográfica, el acceso al conocimiento actualizado, la consolidación de espíritu de cooperación y la respuesta a la exigencia de habilidades tecnológicas del mundo actual.
Tiene la seguridad de que “si los profesores y jóvenes de los países emergentes pueden visualizar este potencial de aprendizaje, en pocos años el desarrollo educativo y económico de nuestros países va a ser muy exponencial”, como lo afirmó en entrevista con la Fundación Eduna (2019). Señalando el ejemplo de países asiáticos como Corea del Sur, Taiwán o Singapur, los cuales alcanzaron desarrollo importante cuando decidieron invertir mucho en mejorar su educación, el profesor Cediel considera que los países latinoamericanos también pueden avanzar implementando propuestas pedagógicas novedosas y socialmente pertinentes que inunden nuestros sistemas educativos.
